Queridos
Reyes Magos……
Así, como todos los niños, comenzaba cuando
era niña mi carta a los reyes magos, y tras esas tres palabras daba rienda
suelta a mis sueños, a mis deseos, y soñaba……soñaba que me traían todo lo que
pedía, soñaba con juguetes, muñecas, juegos, y mi imaginación volaba a un mundo
perfecto en el que los sueños se cumplían, en el que los niños no tenían
necesidades, ni miedos, ni decepciones.
Escribir
la carta era un momento mágico, por lo que conllevaba, soñar…y soñar me alejaba
del mundo, de mi vida; soñar me hacía feliz. Aprendí a soñar desde muy pequeña,
y con 46 ya, sigo soñando, me da vida, me da energía en los momentos más bajos;
sin mi imaginación, sin mis sueños, sería realmente complicado salir adelante
muchas veces.
Pero
este año va a ser distinto, este año he pensado qué en lugar de pedir, de
soñar, voy a dar. Sí, este año voy a centrarme en dar, en ser, en vivir, y lo
que tenga que llegar, ya lo hará, o quizás no, da igual, porque yo habré
disfrutado cada momento de este gran año que acabamos de empezar.
Y
voy a ser mejor persona, sí, al menos lo voy a intentar; pararme y pensar antes
de juzgar, de opinar, pararme y ponerme en el lugar del otro intentando
entenderle, siempre desde el respeto y la tolerancia. Pero también voy a
pararme y pensar y ponerme en mi lugar, por mí, porque yo decido quién puede
hacerme daño con sus palabras, gestos o acciones; y creo que lo mejor será
decidir que nadie puede hacerlo, voy a ser fuerte y quererme un poquito mejor.
Y
voy a serme fiel a mí misma; sí señor, que ya es hora; voy a dejar de pensar lo
que es mejor para los demás, sacrificando mi bienestar y voy a serme fiel, y
amarme un poquito más.
Y
así voy a intentar no defraudarme, no engañarme, porque yo soy mi mayor enemiga
en algunos momentos, y no es justo. Será mejor que sea franca y sincera conmigo
misma y elija cuidarme.
Y
voy a seguir aprendiendo, voy a seguir creciendo, porque me queda un largo,
interminable camino y no quiero perderme, quiero seguir viviendo con la
vitalidad, el optimismo, la fuerza que me caracteriza y no dejarme abatir. Voy
a centrarme en el presente, siendo consciente de lo que me rodea, porque el
aquí y ahora ayudan a mejorar mi bienestar, a conectar con mis sentimientos y a
dejar atrás pensamientos, hechos pasados.
Y
voy a ser paciente, sí, voy a ser paciente, voy a conservar la calma y a saber
esperar, porque las prisas y las decisiones tomadas con celeridad me producen
más estrés, y no obtengo los resultados deseados, satisfactorios, así que voy a
ser paciente.
Pero,
sobre todo, voy a ser agradecida, con el universo, con la vida, con mis amigos,
con mi familia, por todo lo que tengo, por todo lo que soy, por los momentos
tan increíbles que vivo cada día, por los cientos de pequeñas cosas con las que
tanto disfruto.
Y
así voy a ser queridos Reyes Magos este año, no prometo que los 365 días, pero
sí la mayor parte del tiempo, pondré todo de mi parte para ser feliz, y para
hacer feliz a los que me rodean, a los que de verdad me importan, me lo he
propuesto y lo haré, voy a luchar por ello, porque este 2018 va a ser un gran
año, un año lleno de vida, de ilusiones, de sueños cumplidos, de esperanzas, de
alegrías.
Yo
lo voy a hacer, y porque creo que los sueños se cumplen voy a luchar por ellos;
así que, si podéis ayudarme con alguno de ellos, os lo agradeceré.